No es mi primer encuentro con Elísabet Benavent (pueden culpar a Mel del blog La chica de rayas por eso), ni siquiera es la primera vez que reseño alguna de sus sagas y, definitivamente, no es la primera vez que sus libros no me terminan de convencer. Vamos a ver, no quiero decir que esta saga no me haya gustado, porque la realidad es que la disfruté, pero al terminar no me quedó esa sensación tan bonita en el pecho como sí me ha pasado con otros de sus libros. En mi opinión, me pareció una saga correcta que no sobresale entre sus obras pero fueron los libros que la catapultaron a la fama y, muy por seguro, serán leídos y releídos en estos tiempos porque próximamente se estrena la serie homónima.